Una limpieza profunda

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Una limpieza profunda

Salmos 51:10 

Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí.

¿Cómo están mis amadas? 

Las saludo deseando que la paz del Señor gobierne sus corazones.

Deseo que el mensaje de hoy te ayude a a ver cómo está tu corazón internamente a través de la lupa de la palabra de Dios.

Ya que solo ella nos puede llevar a escudriñar en profundidad y darnos cuenta de algún desorden o pecado que este ensuciando nuestra vida y estorbando la comunión con nuestro Padre.

Por ello oro para que el Señor me ayude a darte las pautas necesarias para el proceso de una limpieza profunda como lo hizo el salmista, que Dios nos ayude con su palabra y que crea en nosotras un corazón limpio.

Aprovechando unas hermosas vacaciones que Dios por gracia me regaló y desde la casa de mis padres escribo está enseñanza.

Sepamos esto amadas, Dios nuestro Padre muchas veces nos aparta de lo cotidiano, para hablarnos y mostrar el desorden en nuestro corazón que a lo largo del tiempo se ha ido estresando, llenándose de impurezas.

Y al estar separada de la vida cotidiana y de la rutina, y en un momento cuando había terminado de realizar una tarea específica, me detuve y comencé a meditar y revisar como estaba mi corazón y me di cuenta que necesitaba una limpieza, había un desorden que tenía que ordenar.

Ahora en toda casa, casi siempre hay un cuarto que no se usa para lo que fue diseñado, sino como una bodega, que lo llenamos de cosas y que poco a poco se convirte en un caos, donde permanece cerrado porque no se deseamos que se sepa cómo está el desorden.

¿Tienes un cuarto así en tu casa o en la de tus padres?

En la casa de mis padres hay uno y mi madre aprovechando que la había ido a visitar, me pidió que la ayudara a organizar todo y yo acudí a su llamado y nos pusimos manos a la obra, duramos mucho tiempo  clasificando y poniendo todo en su lugar. 

Por momentos deseé no haber acudido al llamado de mi madre, parecía que más cosas aparecían y que no terminaríamos. Pero poco a poco empezamos a ver resultados, separamos las cosas útiles y lo restante se tiro, no les niego que en muchas cosas viejas recordaba mi infancia que me daba mucha nostalgia y no deseaba soltarlas pero era momento de orden y limpieza.

Mi madre separó cosas en buen estado y algunas regalo. Ella no entendía por qué guardo tanto, pero ahora sabe, que todo lo que queda es necesario y tiene un lugar. 

Fue agotador pero vi a madre satisfecha y alegre porque no tenía que cerrar mas la puerta y pretender que no hay desorden, porque ya estaba limpio.

Y es allí amadas que durante el proceso de limpieza, meditaba que muchas veces nuestra vida espiritual atraviesa circunstancias similares. 

Nuestro corazón está en apariencia, limpio pero hay áreas sin atender o que intencionalmente no limpiamos porque sabemos que será difícil.

Al pasar el tiempo trabajamos en algunos aspectos, crecemos, nos ordenamos, pero hay pecados que no queremos soltar y lugares en los que preferimos cerrar la puerta y no escarbar.

Ya que muchas veces por la vida diaria el trabajo, la rutina y el stress, una tiene el corazón en un caos y es necesario poner un alto en nuestra vida y ordenarla.

Si! necesitamos ordenar nuestra vida ya que todo desorden nos roba la paz.

Amadas una cosa es segura, tenemos que remover pecados y sentimientos guardados y esto será doloroso, requerirá esfuerzo, trabajo, intencionalidad, cosas que debemos dejar ir y no retener más, la mayoría deben ser sustituidas y limpiadas por la Palabra del Señor, ella es nuestra mejor arma de limpieza, tomar lo que ha hecho nido en nuestro corazón y se ha acumulado y pasarlo por el filtro de Su Verdad y permitir que ella limpie, renueve y ponga orden. 

La palabra de Dios nos lleva a confesar nuestras faltas, rebeliones y pecados. 

Así, nos ayuda a purificar nuestra vida. Si nos convertimos en hacedores de la Palabra seremos purificados por ella y habremos cumplido la voluntad de Dios en nuestra vida.

‭Santiago 1:22 

Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos.

También pensaba en que la vida cristiana no está supuesta a vivirse sola, cuando necesitemos ayuda llamemos a nuestros refuerzos como lo hizo mi madre, ella vio que sola no iba a poder con la tarea, aceptó su debilidad y reconoció su impotencia y humildemente me pidió ayuda.

Ahora bien las congregaciones se crearon justamente para relacionarnos con nuestros hermanos y hermanas, y entre ambos llevar nuestras cargas, leamos lo que dice:

‭Hebreos 10:24-25 

Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.

Saben hermanas hay muchas personas pasando procesos, sin hablarlo con nadie orando en silencio, respirando profundo y secando sus lágrimas, porque muchas veces desean no pedir ayuda por largo tiempo y cierran la puerta de su corazón.

Hermana, sí tú eres una de esas personas quiero decirte que no estás sola, Dios está disponible para ir a tu ayuda, él escucha la oración de sus hijas, no desistas, no cierres la puerta, habla con él, si hoy está tocando tu corazón, déjalo entrar, la biblia dice en:

‭Apocalipsis 3:20

He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo. 

Amada hermana si quizás tienes sentimientos guardados por mucho tiempo, algún pecado que has mantenido oculto, tal vez raíces de amargura, celos, ira, falta de perdón o inseguridad, no continúes con la puerta cerrada, permitiendo que sigan anidando pecados llevándose tu paz, disponte a trabajar en ello, deja que nuestro Señor por medio de Su palabra te ayude a limpiar todo pecado que siempre está delante de él, leamos lo que las Escrituras dice en:

Santiago 5:16

Por tanto, confesaos vuestros pecados unos a otros, y orad unos por otros para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede lograr mucho. 

Amada no pases más tiempo dejando de hacer lo que debes, confiesa tu pecado y apártate de el, confía en que Dios te perdonará y serás libre para disfrutar de la libertad que produce el caminar en Su Voluntad.

Amada Jesús con Su obra redentora nos dio esa libertad, solo que no la usemos para nuestros deleites que no son agradable a los ojos de Dios, veamos:

‭Efesios 4:30 

Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención.

Amadas no vivamos en nuestras propias fuerzas, sino en el poder de Cristo que hay en nosotras por medio de Quién, podemos despojarnos de todo peso y del pecado que nos asedia y que lo logramos poniendo nuestros ojos en Él, el autor y consumador de nuestra fe, como lo dice en Hebreos 12:1-2

Y en los versículos 12 al 15 dice:

Por lo cual, levantad las manos caídas y las rodillas paralizadas; y haced sendas derechas para vuestros pies, para que lo cojo no se salga del camino, sino que sea sanado. Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados.

Amada hay una verdad aquí, la vida cristiana no es fácil, Dios nos lo advirtió. 

En el proceso de ir hacia la santidad nos vamos a seguir ensuciando y vamos acumulando suciedad, polvo y desorden, por ello mantengamos el orden cada día, que nadie sobrepase a lo primordial en nosotras, mantengamos el orden y el diseño que Dios nos dejó.

Cómo mujeres de Dios hay un papel que debemos cumplir en nuestro hogar y si nuestro corazón no está alineado a sus planes nuestra vida y de los que nos rodean será un caos.

Apuntemos llegar poco a poco al carácter de la mujer virtuosa que describe:

‭Proverbios 31:27-28 

Considera los caminos de su casa, Y no come el pan de balde. Se levantan sus hijos y la llaman bienaventurada; Y su marido también la alaba.

Para muchas será un estándar muy alto pero sabes, tenemos al Espíritu Santo que nos ayudará a ordenar el caos, si lo pedimos.

Por ello continuemos y no miremos atrás, soltemos todo lo que no nos deja avanzar y con la ayuda de Dios y de nuestras hermanas con oración y ruego veremos los resultados, una limpieza profunda de vez en cuando, es necesario, no pretendamos pensar que siempre todo esta en orden y maravilloso, aún no hemos llegado a esa perfección, Pablo dijo:

‭Filipenses 3:13-14

Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús.

Hermanas que maravilloso es tomar un alto y nuevamente ordenar el corazón, permitiendo a  Dios con su palabra lo limpie.

Los resultados será satisfactorios, la paz vuelve a nuestra vida.

Amada espero que te pueda servir esta reflexión basada en una experiencia mientras estaba de vacaciones, y si te sirvió te invito a compartir este mensaje para que otras también puedan ser edificadas.

LA LIMPIEZA PROFUNDA Y EL ORDEN ES ESCENCIAL LOGRANDO ASI, UNA VIDA CRISTIANA FRESCA Y SALUDABLE.

¡Dios con nosotras!