LA BELLEZA DE LA MUJER
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LA BELLEZA DE LA MUJER 1 Pedro 3:3-4
Vuestro atavío no sea el externo de peinados ostentosos, de adornos de oro o de vestidos lujosos, sino el interno, el del corazón, en el incorruptible ornato de un espíritu afable y apacible, que es de grande estima delante de Dios.
Cuando Dios creó los cielos y la tierra se maravilló de su creación viendo a su alrededor que todo era “bueno”. Solo una vez Dios determinó que el diseño de algo no era bueno. Sucedió antes de crear a la mujer. Dios dijo en
Génesis 2:18
Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él.
¡Algo faltaba!
El diseño estaba incompleto. Sin la mujer, no habría historia ni nadie para leerla.
Toda la creación, incluyendo al hombre y la mujer, fue diseñada para exhibir la belleza de la gloria de Dios. El concepto de una mujer bella ha sido distorsionado en esta cultura.
El problema radica en no entender la verdadera belleza según el diseño de Dios.
La Biblia dice que la belleza de la mujer debe ser primeramente “la interna, la del corazón, como leímos en la primera carta de Pedro.
Esta demás decir que a ella no le interesa lucir bien, sino que debe enfocarse en aquello que permanece, debe vestirse de Cristo y de Su carácter.
Una mujer con un espíritu afable es tierna, sabia y prudente.
Afable significa apoyarse en Dios y no en la propia fuerza, como para manipular las cosas y que salgan a nuestra manera.
Nuestra cultura nos hace creer que una mujer afable es débil y no tiene personalidad propia.
La belleza de la mujer es un espíritu apacible que significa callado y atento a la vez.
Cuando la Biblia habla de apacible no se refiere a la ausencia de hablar. Callada describe una actitud de calma, serenidad y tranquilidad. Es permanecer quieta, firme y en paz. Un espíritu apacible es lo contrario de estar ansiosa, angustiada y afanada.
La belleza de la mujer se exhibe con una actitud que respeta a los demás y estima la línea de mando de la autoridad establecida por Dios. Una mujer apacible responde como María cuando dijo:
Lucas 1:38
Entonces María dijo: He aquí la sierva del Señor; hágase conmigo conforme a tu palabra. Y el ángel se fue de su presencia.
Otro aspecto de la belleza interna de la mujer es su inclinación hacer sumisa.
Dios creó a la mujer con la disposición de responder positivamente a ser dirigida.
De esto nos hablará Amayra:
En Efesios 5 :21 y 22
en adelante en el 21 nos habla de someternos unos a otros en el temor de Cristo ya ahí empezamos bien en el temor de Cristo nosotras como mujeres y nos sometemos a Cristo nos va a hacer mucho más fácil someternos al esposo voluntariamente.
Tenemos errores, defectos pero con la ayuda de Dios podemos esforzarnos a obedecer lo que él nos pide no, así que la sumisión no tiene nada que ver con la inferioridad, al contrario desde un principio Dios en Génesis nos habla de que Dios tomó de la costilla de Adán, para hacernos a nosotras no para formarnos hizo a la mujer y la sacó de su costado y cerca de su corazón, para que no estemos ni a la cabeza ni a los pies sino a su costado a la par, así que es muy importante conocer nuestro diseño para que no haya ningún problema, ni roces a la hora de someternos y cumplir el diseño de Dios en nuestras vidas, para darle la gloria a Dios porque Dios instituyó el matrimonio y para Su propia gloria y nuestro bienestar es gozar de esa institución que Dios creó en el matrimonio.
Bueno hermanas les mando un beso un abrazo muchas bendiciones.
Gracias.
Tal vez hayas escuchado hablar de la “mujer de Proverbios 31” toda tu vida y te sientes como que esta es una meta inalcanzable.
Ahora te has preguntado alguna vez:
¿Qué hace que Dios mire a una mujer y diga: "¡Es hermosa!"? La respuesta es:
Ver a una mujer que teme, llena de fe y piadosa.
Una mujer así se convierte en una pieza conmovedora e irresistible en un mundo ruidoso y a la vez vacío.
Miremos lo que dice:
Proverbios 31:30
Engañosa es la gracia, y vana la hermosura; La mujer que teme a Jehová, esa será alabada.
Amadas es su relación con Dios, que hace a la mujer reverente a Él.
Hermanas a medida que va avanzando la vida, cada generación de mujeres tiene que lidiar con aspectos de la feminidad, atributo que está siendo golpeado mucho por el feminismo de hoy.
Al respecto de esto nos hablará Gisela:
Necesitamos entender que como hijas de Dios somos llamadas a reflejar a Cristo en nuestras vidas y estamos en este mundo para hacer sal y luz hermanas, como dice la palabra por lo tanto debemos cada día cultivar la feminidad de nuestro andar diario.
Más que nunca vivimos en una era donde la sociedad nos quiere hacer creer que empoderarnos nos llevará a ser libres y felices pero Dios dice todo lo contrario que en nuestra manera de vivir debemos reflejar a Cristo, si somos fieles al pacto matrimonial debemos aprender a ser cuidadosas en el hogar, de honrar a nuestros padres también de buscar al Señor en oración, leyendo su palabra para poder así, de esa manera tomar decisiones sabias que nos lleven a demostrar que somos mujeres que caminan conforme a los preceptos de Dios y que vivimos bajo el señorío de Cristo y que nos gozamos en amar y cumplir sus mandamientos, que el Señor les bendiga.
Al escuchar hablar a Gisela recuerdo a Sara con un espíritu notable, leamos:
1 Pedro 3:6
Como Sara obedecía a Abraham, llamándole señor; de la cual vosotras habéis venido a ser hijas, si hacéis el bien, sin temer ninguna amenaza.
Mi amada la mujer de Proverbios 31 fue una mujer increíblemente valiente, viviendo en una cultura donde las mujeres no estaban logrando todo lo que ellas estaban esforzándose en hacer.
Nosotras como hijas de Dios tenemos que vivir según el diseño de Dios, busca recapturar el diseño original de la mujer tal y como fue ideado por Su creador, siendo así una “mujer contracultura” creada con un rol único para la gloria de Dios, femenina e idónea para el varón.
¡Un gran desafío!
Ahora ¿Cómo vive una mujer contraculturalmente?
En las últimas tiempos, las mujeres han sido motivadas a “hacer las cosas a su manera” y muchas se han dejado engañar por las promesas vacías del feminismo.
Tenemos un gran reto: el de ser mujeres que desean volver a las sendas antiguas y abrazar el hermoso diseño de Dios.
Ahora tenemos a Bety que nos dará su mirada sobre la mujer cristiana:
este capítulo de
1 Timoteo 2:9-15 que nos muestra nos hace saber cómo debe vestirse la mujer si bien de hecho sabemos no cómo debemos vestirnos adecuadamente y ser testimonio para las jóvenes para las nuevos que vienen a la casa de Dios, que ellos puedan ver en nosotros lo que es una mujer cristiana al servicio de Dios, sobre todo una mujer temerosa de Dios, para así generar imitaciones en la nueva generación enseñar contener que ellas vean el amor de Cristo en nuestra vida, si bien fue creada de la costilla, la cual demanda sujeción no estar por encima del hombre.
Dios bendijo el ministerio público de las mujeres aunque hoy sigue ese debate en algunas Iglesias, nosotras mujeres debemos ser fieles a la enseñanza de la Biblia, la palabra inspirada por Dios para la humanidad.
Ese es el rol de una mujer con decisiones y siempre por supuesto también guiada por Dios y eso hace a que también nos sentimos cuidadas por Dios.
y toda aquella mujer que tiene a Cristo debe avanzar y avanzar confiada en Dios, tenemos trabajo en la obra del Señor, nosotras siervas de Dios guiemos a las mujeres jóvenes con gracia, rodéalas cuídalas y así como esto cuántas cosas podemos hacer cuando nos ponemos en las manos, de nuestro Señor buscando siempre en la palabra guiadas por el Espíritu Santo y el Señor nos va ayudando, a Débora la sacó debajo de la higuera que estaba sentada ¿A nosotros de dónde nos puede sacar? así que bueno recibe la bendición de Dios y pon tu mano en el arado te abrazo en el amor de nuestro señor Jesucristo, amén.
Cuando las Escrituras menciona a una mujer o a las mujeres, es porque hay alguna instrucción para nosotras de como estar al servicio de Dios, ejemplo:
Deborah, Elizabeth, María, Ana y muchas más.
Mi amada:
¿Estás realmente deseosa de ser radical; obedecer las Escrituras y demostrar que eres una mujer conforme al corazón de Dios?
Cuando decimos que queremos ser mujeres conforme al corazón de Dios, debemos dejar que el Espíritu Santo, Su Palabra, el evangelio de Cristo, sea lo que controle nuestra vida.
Esto es lo que hará un impacto en esta cultura y un mundo perdido, que desesperadamente necesita ver a Cristo encarnado, Su vida vivida en todas las áreas de nuestras vidas.
Ahora lo contrario a la mujer temerosa tenemos a la mujer necia:
Proverbios 9:13
La mujer insensata es alborotadora; Es simple e ignorante.
Este verso, menciona a la mujer obstinada que tiene una mentalidad que dice: “nadie tiene que decirme lo que tengo que hacer”.
Hermanas hagamos un rápido autoexamen personal:
¿Qué te atrae más: la belleza del mundo o la de Cristo?
¿Embellecer tu rostro o embellecer tu corazón?
¿Vestirte con ropa fina o vestirte de pureza?
¿Escoger accesorios bonitos o adornarte con un espíritu afable y apacible?
¿Exhibir tu belleza o exhibir Su belleza?
¿Querer verte bien o querer hacer el bien?
Amada cuando pienses en embellecerte, no pienses solo en lo externo sino, debes pensar en lo interno y en lo duradero.
LA BELLEZA DE LA MUJER PIADOSA, COMIENZA EN SU CORAZÓN.
¡Dios con nosotras!
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