LA MANO DE DIOS SOBRE NOSOTRAS
Canal de YouTube 👇
LA MANO DE DIOS SOBRE NOSOTRASSalmos 145:16
Abres tu mano, Y colmas de bendición a todo ser viviente.
A lo largo de las Escrituras se hace referencia a la mano del Señor y Su ayuda divina que se manifiesta una y otra vez; y lo más asombroso:
¡Sus poderosas manos crearon el universo!
Se declara en la Escritura está verdad:
Salmos 89:13
Tuyo es el brazo potente; Fuerte es tu mano, exaltada tu diestra.
La "mano de Dios" puede ser usada como metáfora de la acción de el cuidado, protección, fortaleza, posesión y salvación de parte de Dios.
Lo hizo con su pueblo de las manos de faraón, por amor.
Deuteronomio 7:8
Sino por cuanto Jehová os amó, y quiso guardar el juramento que juró a vuestros padres, os ha sacado Jehová con mano poderosa, y os ha rescatado de servidumbre, de la mano de Faraón rey de Egipto.
Entonces podemos decir acerca de "la mano de Dios" que en las Escrituras significa algo muy profundo.
La mano invisible e intangible de Dios está sobre nosotras: liderando, guiando, protegiendo, fortaleciendo y dándonos ánimo.
Al leer el salmo 145 me deleito ver cómo la amorosa mano de mi Padre, reposaba en el rey David y él prorrumpe con alabanza por ver Su mano en todo.
"Cuando adoras a Dios, puedes estar segura de que la mano de Dios también está sobre ti"
Salmos 145:16
Abres tu mano, Y colmas de bendición a todo ser viviente.
Esta metáfora describe el gran amor y fidelidad de Dios, la extraordinaria generosidad de Dios, quien nos abre Su mano para satisfacer nuestros deseos y necesidades basados en sus planes.
Hubo un profeta en la Escrituras que sintió personalmente y de muy cerca está acción de parte de Dios.
Veamos a Esdras, él cayó en gracia delante del rey Artajerjes, fue ayudado, le proveyó de lo mejor que tenía el rey, como plata, oro, utensilios, animales, y todo lo que se requería para el altar del templo de Dios en Jerusalén y aun se le dió ofrendas que daba el pueblo de Babilonia.
Vemos maravillosamente que:
"la mano de Dios estaba sobre Esdras"
Esdras 7:6
Este Esdras subió de Babilonia. Era escriba diligente en la ley de Moisés, que Jehová Dios de Israel había dado; y le concedió el rey todo lo que pidió, porque la mano de Jehová su Dios estaba sobre Esdras.
Esdras sería el encargado de la reconstrucción de Jerusalén, estableciendo: la adoración.
Como sacerdote renovó la celebración de las festividades y debía además de eso enseñar las escrituras, escudriñar la ley, cumplirla y enseñarla, pero sabía que la mano buena del Señor estaba sobre él, guiándolo y fortaleciéndolo, él se llevó 1500 hombres más con él, hasta un total de probablemente 5000 personas.
Esdras estaba agradecido por la misericordia de Dios, veamos:
Esdras 7:28
e inclinó hacia mí su misericordia delante del rey y de sus consejeros, y de todos los príncipes poderosos del rey. Y yo, fortalecido por la mano de mi Dios sobre mí, reuní a los principales de Israel para que subiesen conmigo.
Vemos cómo la mano de Dios es una muestra de la gracia inmerecida para realizar tareas que Dios nos manda hacer y quizás afrontar las dificultades, enfermedades, pruebas de la vida con Su fortaleza.
¡La bondadosa mano de nuestro Dios está sobre nosotras!
Leamos está promesa que fue dada a David y es para mí y para ti:
Salmos 89:21
Mi mano estará siempre con él, Mi brazo también lo fortalecerá.
Ahora, la mano de Dios así como da animo y fortaleza cuando somos parte de su pueblo, también actúa para atraer y salvar a los que andan en rebeldía, en caminos malos viviendo en sus caprichos, lo hizo con su pueblo y tambien conmigo y contigo:
Isaías 65:2
Extendí mis manos todo el día a pueblo rebelde, el cual anda por camino no bueno, en pos de sus pensamientos;
¡Gracias Señor!
Cuando Jesús vivió en la tierra también uso sus poderosas manos para dar sanidad, imponía sus manos sobre los enfermos y ellos sanaban.
Marcos 8:23-25
Entonces, tomando la mano del ciego, le sacó fuera de la aldea; y escupiendo en sus ojos, le puso las manos encima, y le preguntó si veía algo. Él, mirando, dijo: Veo los hombres como árboles, pero los veo que andan. Luego le puso otra vez las manos sobre los ojos, y le hizo que mirase; y fue restablecido, y vio de lejos y claramente a todos.
Cómo vemos que en el tiempo de Jesús, Dios obró usando sus benditas manos humanas para manifestar Su gloria y así Jesús recibía todo el respaldo por ser Su Hijo amado.
La gente veía sanidad, bendiciones a través de Jesús,
Aunque en muchas ocasiones no pudo obrar por la incredulidad de los Israelitas.
Jesús en los últimos momentos de su Ascensión les dijo a sus discípulos que sus manos serían usadas para sanar a los enfermos
Marcos 16:18
tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos, y sanarán.
De hecho, la gente fue sanada mediante la imposición de sus manos y otros fueron llenos con el Espíritu Santo.
Hechos 8:17
Entonces les imponían las manos, y recibían el Espíritu Santo.
El mismo Saulo de Tarso recibió el Espíritu Santo por la imposición de manos de Ananías
Hechos 9:17
Fue entonces Ananías y entró en la casa, y poniendo sobre él las manos, dijo: Hermano Saulo, el Señor Jesús, que se te apareció en el camino por donde venías, me ha enviado para que recibas la vista y seas lleno del Espíritu Santo.
También Timoteo recibió dones a través de Pablo por la imposición de manos.
2 Timoteo 1:6
Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos.
En los tiempos de los primeros discípulos, la gracia de Dios, Su mano de poder se manifestaba a través de ellos para dar testimonio del poder del nombre de Jesús.
Ahora en estos tiempos, todo lo que he mencionado como son sanidades, llenura del Espíritu Santo, recibimiento de dones, sucede solo por gracia, Dios muestra su poder soberanamente, aunque Él, sigue haciendo cosas maravillosas, sigue dando sanidad, pero ya no por manos de hombre imperfectos, sino por el obrar del Espíritu Santo y conforme a la voluntad de Dios, sentimos Su mano a través de el Espíritu Santo, quién nos llena de fortaleza, poder, protección y Su guía en todo. Cuando la mano de Dios está sobre nosotras todo cambia, Su mano nos ayuda en las dificultades, somos luz en medio de la oscuridad, testimonios vivos de la Soberanía de Dios, somos equipadas con valentía para realizar algún servicio y así hacer uso de nuestra manos para que en oración abracemos al que sufre, para unir al que está separado, nuestras manos son extensión de Sus brazos para animar, fortalecer y consolar en medio de las tribulaciones.
Amadas por último quiero tomar en consideración las palabras que utilizó Juan para describir al Salvador resucitado y glorioso:
Apocalipsis 1:17-18 NTV
Cuando lo vi, caí a sus pies como muerto; pero él puso la mano derecha sobre mí y me dijo: «¡No tengas miedo! Yo soy el Primero y el Último. Yo soy el que vive. Estuve muerto, ¡pero mira! ¡Ahora estoy vivo por siempre y para siempre! Y tengo en mi poder las llaves de la muerte y de la tumba.
Cuando Él posa Su mano sobre nosotras, podemos, al igual que Juan, sentir confianza y vivir en Él y así nos conectamos al Autor de la Paz, a Su amor perfecto y Redentor, podemos llegar a experimentar la veracidad de la promesa del Señor, de Jesucristo nuestro Redentor y Salvador viviente:
Salmos 63:8 NTV
Me aferro a ti; tu fuerte mano derecha me mantiene seguro.
Hermanas puedo dar testimonio que Él vive y nos extiende Su amorosa mano a cada una.
Aún hay salvación para la que está alejada de Él, para la que necesita fortaleza, protección, gozo y paz.
Isaías 59:1
He aquí que no se ha acortado la mano de Jehová para salvar, ni se ha agravado su oído para oír.
¡Amén, glorioso Señor!
No desconfiemos de esa Mano que sostiene el cielo y la tierra.
LA MANO DE DIOS REPOSA SOBRE NOSOTRAS A TRAVÉS DE SU SANTO ESPÍRITU Y TENEMOS DESCANSO EN LAS DIFICULTADES.
!Dios con nosotras!
Comentarios
Publicar un comentario