Él PERDONA NUESTROS PECADOS

EL PERDONA NUESTROS PECADOS

Zacarías 3:4

Y habló el ángel, y mandó a los que estaban delante de él, diciendo: Quitadle esas vestiduras viles. Y a él le dijo: Mira que he quitado de ti tu pecado, y te he hecho vestir de ropas de gala.

Hermosa declaración de el ángel, esta escena sucede cuando vamos a él en arrepentiemiento y hay perdón de pecado.

Dios manda a todos que acudan a él en arrepentiemiento y más aún a los que estan separadas de él.

Hechos 3:19 hay un llamado, leamos:

Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio,

Vivir sin Dios, es estar separada de él, sin paz, agobiadas con los problemas, pensando que estamos mejor sin él, pero esa es una gran mentira, es el pecado de orgullo que nos hace pensar así, es una mentira de Satanás, ¡el orgullo separa de Dios!

El orgullo es el pecado más antiguo del mundo, es más, antecedió al mundo, Satanás y sus ángeles cayeron por orgullo, no estuvieron satisfechos con su primer estado, Satanás trató de elevarse a sí mismo, y cayó. 

Y fue así que el orgullo dio al infierno sus primeros habitantes.

En Isaías se relata como fue esto, veamos:

Isaías 14:11-12

Descendió al Seol tu soberbia, y el sonido de tus arpas; gusanos serán tu cama, y gusanos te cubrirán. ¡Cómo caíste del cielo, oh Lucero, hijo de la mañana! Cortado fuiste por tierra, tú que debilitabas a las naciones.

El orgullo fue lo que sacó a Adán y Eva del paraíso, no estubieron contentos con el lugar que Dios les había asignado, y fue así que, por la desobediencia hizo su entrada a el pecado, el sufrimiento y la muerte, ellos fueron separados de Dios.

Génesis 3:23-24 

Y lo sacó Jehová del huerto de Edén, para que labrase la tierra de que fue tomado. Echó, pues, fuera al hombre, y puso al oriente del huerto de Edén querubines, y una espada encendida que se revolvía por todos lados, para guardar el camino del árbol de la vida.

El orgullo se asienta en el corazón de todas nosotras por naturaleza, nacimos ya orgullosas. 

El orgullo nos hace confiar en nosotras mismas, haciéndonos creer que somos suficientemente buenas sin Dios, ¡autosuficientes! El orgullo tapa nuestros oídos para que no escuchemos consejo, nos impulsa a rechazar el evangelio de Cristo, a andar por nuestro propio camino. 

Pero Dios quiere que procedamos al arrepentimiento y cuando esto sucede, esto pasa en los cielos:

Lucas 15:10

Así os digo que hay gozo delante de los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente.

Sin Dios andamos fuera de Su voluntad, vamos caminando por la vida como ovejas sin pastor y sin su cuidado, Jesús tiene misericordia al vernos viviendo así, leamos:

Mateo 9:36

Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor.

Amada, quizás en estos momentos estás viviendo así, separada de él, apartada de Su amor o talvez hay alguien que aún no conoce al Señor, te invito a seguir leyendo o escuchando este mensaje de parte del Señor para ti:

Hay una historia que nos muestra el perdón de Dios.

En nuestra historia había un joven que quiso separse de su padre para vivir su propia vida, pidio su herencia y lo gasto y cuando ya no tenía nada para comer el, tocó fondo y se determinó a ir a su padre, en busca de perdón por haberle fallado, el dió un primer paso, uno determinante.

Lucas 15:18

Me levantaré e iré a mi padre, y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti.

Esto nos enseña entonces a dar un primer paso, romper el orgullo del corazón y tomar una decisión determinte a venir a volver a Jesús sin temor a ser rechazada.

No hay pecado que no pueda ser perdonado.

En Cristo hay perdón, no importa lo que hayas hecho, él está esperando para extender sus brazos y perdonarte tus pecados. La historia continúa así:

Lucas 15:20

Y levantándose, vino a su padre. Y cuando aún estaba lejos, lo vio su padre, y fue movido a misericordia, y corrió, y se echó sobre su cuello, y le besó.

Que confortante saber cómo actuó el padre, lo hace basado a su misericordia, a el amor que tiene por su hijo que va a confesarle sus faltas, así Dios nuestro Padre actúa con los que van hacia él, por perdón, sigamos con la historia:

Lucas 15:21

Y el hijo le dijo: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, y ya no soy digno de ser llamado tu hijo.

¡Oh que hermosa reconciliación!

Cómo todo padre su primera reacción es de felicidad, de gozo al ver a su hijo volver a él, y quiere que todos sepan que el retorno, volvió, se arrepintió, su hijo que estaba muerto en sus delitos y pecados volvió a vivir, y el padre lo celebra, al ver a su hijo con ropas sucias, le da unas limpias.

Lucas 15:22

Pero el padre dijo a sus siervos: Sacad el mejor vestido, y vestidle; y poned un anillo en su mano, y calzado en sus pies.

Dios muestra Su amor por los pescadores arrepentidos genuinamente, da una vestidura nueva.

!somos bienveanturadas al recibir el perdón!

Salmos 32:1

Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada, y cubierto su pecado.

Él nos viste con Su justicia con vestiduras santas y desechas las viles, lo vemos en nuestra cita del inicio.

Él nos ama tanto que nos aferra a él y no nos deja como muestra de amor y misericordia.

Ahora estamos en un nuevo pacto, el de la gracia, dónde el Padre mandó a Su hijo a morir por el mundo, porque supo que no seriamos capaces de salvarnos a nosotras mismas, necesitamos de un Salvador.

En él tenemos perdón de los pecados del pasado, aún de los futuros dice la biblia, ahora podemos acercarnos a Dios en busca de perdón por los méritos de Cristo.

Por Su muerte, hemos sido reconciliadas, tenemos acceso al Padre a través del camino que es Jesús.

Juan 14:6

Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.

Jesús nos espera para darnos vida eterna con él, él es Justo para perdonarnos de toda maldad, somos justificadas por medio de la fe en él, por Su obra en la cruz, el apóstol Pablo dice:

Romanos 5:1-2

Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo; por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.

Ven a Jesús si estás alejada de él,  ven en arrepentimiento y fe y Jesús obrara en tu corazón, hoy es día de salvación mañana no sabemos si llegará.

2 Corintios 6:2

Porque dice: En tiempo aceptable te he oído, Y en día de salvación te he socorrido. He aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación.

Busquemos su perdón y seremos salvos de la ira de Dios, busquemos al Señor ahora que podemos encontrarle, un día ya no estará.

Aquí un llamado para las que están apartadas de Él:

Joel 2:12-13

Por eso pues, ahora, dice Jehová, convertíos a mí con todo vuestro corazón, con ayuno y lloro y lamento. Rasgad vuestro corazón, y no vuestros vestidos, y convertíos a Jehová vuestro Dios; porque misericordioso es y clemente, tardo para la ira y grande en misericordia, y que se duele del castigo.

EL PERDÓN DE DIOS ES BENEFICIO PARA EL QUE ESTA SEPARADO DE ÉL, DA ALIVIO , GOZO Y PAZ EN EL CORAZON. ¡CON ÉL ESTARÁS SEGURA!

¡Dios con nosotras!