¿CANTAS EN LA ADVERSIDAD?
Salmos 92:1
Bueno es alabarte, oh Jehová, Y cantar salmos a tu nombre, oh Altísimo.
La respuesta natural de nosotras como hijas de Dios es de alabarle con gozo, cuando todo va bien, pero,¿Tenemos la misma respuesta en los momentos de adversidad?
¿Componemos un canto a Dios, ante las situacion difícil de nuestra vida?
Es el deseo de nuestro señor que cantemos en el día de aflicción, porque en los canticos y alabanzas, Él promete Su presencia en medio de Su pueblo.
Debemos determinarnos a cantar también en la adversidad, porque es un indicador de la verdadera condición de nuestro corazón.
Admiro mucho la determinación de María de Nazareth, ella fue elegida por nuestro Padre para ser partícipe de la obra de redención para la humanidad, ni más ni menos para ser la madre de nuestro Salvador, y fue en el tiempo que ella estaba desposada con José, ella quedó en cinta antes de convivir con su esposo y la ley la condenaba ante los ojos de el, ella debió ser apedreada por estar encinta sin estar aun viviendo con José su esposo, pero Dios obró en el corazón de José,
enfrentando así toda adversidad.
Luego Maria inspirada por el Espíritu Santo engrandece a Su Señor y expuso su cántico de alabanza, por haber sido elegida para su servicio.
Lucas 1: 47 hacia adelante.
Ahora quiero exaltar un ejemplo glorioso de la verdadera espiritualidad, de la evidencia total del Espíritu Santo, quiero dar loor y reconocimiento a Jesús, que en su más duro momento, Él cantó:
Marcos 14:26
Cuando hubieron cantado el himno, salieron al monte de los Olivos
Nuestro Señor Jesús cantó antes de ir a morir por la salvación del mundo, se disponía hacer la voluntad de Su Padre, Él cantó antes de una noche de muchas tinieblas, donde sería luego arrestado y abandonado por sus discípulos, estaba determinado a realizar la mayor expresión de Su amor, se disponía a dar Su vida para salvarnos del castigo que nosotras merecíamos por nuestros pecados.
¡Una cruz le aguardaba!
¿Y nosotras como reaccionamos a las pruebas, cada vez que nos pasa algo terrible?
O ¿Cuándo sabemos que vamos a enfrentar situaciones dolorosas? ¿nos quejamos y nos preguntamos porque a mí?
¿Hemos intentado cantar en esas situaciones?
Amadas quiero seamos honestas a veces nos gana el desánimo, somos débiles ante las pruebas y nos invade la tristeza y claudicamos.
Es así o solo me pasa a mi?
Recordemos a los Israelitas cuando estaban cautivos, estaban en tiempos de esclavitud, anhelaban regresar, extrañaban su tierra, y los de Babilonia les pedían que cantasen, pero ellos no estaban deseosos de cantar en la adversidad, era tal su tristeza.
Salmos 137:3-4
Y los que nos habían llevado cautivos nos pedían que cantásemos, Y los que nos habían desolado nos pedían alegría, diciendo: Cantadnos algunos de los cánticos de Sion. ¿Cómo cantaremos cántico de Jehová En tierra de extraños?
Nosotras como seguidoras de
Jesús debemos determinarnos a cantar, debemos aconsejar a nuestros corazones, cantar en la adversidad, nuestra alma se animará y nuestro corazón se regocijara, Pablo también nos anima hacerlo:
Colosenses 3:16 (b)
...Cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales.
Pablo sabe que si cantamos en tiempos difíciles nos hará llegar a un nivel de santidad que no se puede entender humanamente, es pasar a otro nivel, es estar cautivadas por El Espíritu Santo, que nos lleva a ver porque debemos cantar, veremos el sufrimiento o la adversidad con otra perspectiva, además veremos el propósito del sufrimiento, por eso tomemos la decisión de entonar alabanzas al Dios Altísimo.
¡Pablo lo experimento!
Miremos:
Hechos 16:23-25
Después de haberles azotado mucho, los echaron en la cárcel, mandando al carcelero que los guardase con seguridad. El cual, recibido este mandato, los metió en el calabozo de más adentro, y les aseguró los pies en el cepo. Pero a medianoche, orando Pablo y Silas, cantaban himnos a Dios; y los presos los oían.
Ahora, ¿Qué es lo que nos lleva a cantar cuando estamos en medio de las dificultades, cuando estamos batallando una etapa de oscuridad que nos roba el gozo?
Es el amor hacia nuestro Señor Jesucristo y que Su nombre sea glorificado.
¿Y sabes cuando sucede esto?
Cuando tenemos puesta la mirada en el galardón, en las riquezas eternas perdurables, mirar las cosas que son eternas y no las que son efímeras.
Jesús soporto el sufrimiento porque Él tenía puesta su mirada en el galardón, esa es la única manera de vivir llenas del Espíritu Santo en el momento de adversidad.
Hermanas cuándo nuestra perspectiva está puesta en los sufrimientos, en las tribulaciones y todos los padecimientos solamente estamos agrandando el dolor en nosotras, pero cuando entendemos que es para nuestro bien y crecimiento, cambia toda la perspectiva y se acumula en nosotras ese gran peso de gloria y mayor recompensa.
2 Corintios 4:17
Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria;
El Apóstol Pedro también nos invita a estar alegres cuando recibamos toda clase de padecimientos por causas ajenas a nosotras.
1 Pedro 4:12-13
Amados, no os sorprendáis del fuego de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña os aconteciese, sino gozaos por cuanto sois participantes de los padecimientos de Cristo, para que también en la revelación de su gloria os gocéis con gran alegría.
El Señor nos toma por dignos de poder participar de sus sufrimientos, sí pensamos de esa manera cambiará toda nuestra mirada natural, de tal forma que vamos a glorificar al Señor cantando en medio de las pruebas y llenas de él imitaremos a nuestro Señor que cantó antes de padecer.
Debemos alegrarnos porque grande será nuestra recompensa en los cielos, "grande" dijo él Señor ¿Amadas ustedes creen que para Él Señor grande es algo sin valor o insignicante?
Jesús no estaba exagerando, es una recompensa que nunca se va a terminar, Jesús nos dice en:
Mateo 5:12
Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros.
Por eso cuando estemos en las pruebas que no, se nos olvide el objetivo, el propósito de la prueba que es para bien y eso nos llevará a cantar, a alabar y dar gracias y si somos capaces de cantar en esas circunstancias, entonces eso mostrará que estamos viviendo por fe y no por vista.
Además al cantar sentiremos paz, nuestro corazón confiará y reposará en sus promesas, esa paz será como un escudo, una protección para nuestra alma y nuestro corazón y después de pasar las pruebas seguiremos cantando, empezamos el canto en las pruebas, pero nuestro corazón tendrá el anhelo de seguir cantando, ese canto será de agradecimiento por la victoria en Jesús.
Amadas al cantar en momentos de adversidad, nos estaremos uniendo al coro celestial que entonan cantos al Dios Eterno.
Un día nuestra fe será vista y nuestras oraciones se convertirán en cánticos.
Entonces practiquemos pues lo que haremos por la eternidad junto a los ángeles y a nuestro Rey Jesús, cantemos en todo momento siendo agradecidas por tener más de lo que merecemos.
Para finalizar digo entonces, que lo ideal es cantar en medio de la aflicción y no se trata de alegrarnos por lo malo de la situación, sino porque Dios es el Rey Soberano y Todopoderoso y en Él esta nuestra esperanza, este puede ser el Sacrificio de alabanza en momentos de adversidad que a Dios le agrada.
Hebreos 13:15-16
Así que, ofrezcamos siempre a Dios, por medio de él, sacrificio de alabanza, es decir, fruto de labios que confiesan su nombre. Y de hacer bien y de la ayuda mutua no os olvidéis; porque de tales sacrificios se agrada Dios.
Amadas hermanas que el Señor nos ayude a que nunca dejemos de cantarle y adorarle, aun cuando la adversidad golpee a nuestra puerta.
DECIDIR CANTAR EN LA ADVERSIDAD, ES PREPARAR NUESTRO CORAZÓN PARA ENTRAR A UN MAYOR NIVEL DE SANTIDAD.
¡Dios con nosotras!
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