CAMINEMOS CON JESÚS

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CAMINEMOS CON JESÚS

Salmos 25:4-5

Muéstrame, oh Jehová, tus caminos; Enséñame tus sendas. Encamíname en tu verdad, y enséñame, Porque tú eres el Dios de mi salvación; En ti he esperado todo el día.

¿Alguna vez has pedido a Dios como David, poder caminar junto a él o que te enseñe o guie la senda de tu vida? 

Y lo mejor aún ¿Has reconocido que Él es Dios que da salvación y no hay en otro esperanza?

Hay una verdad en nuestra vida, antes de ser cristianas andábamos sin rumbo, sin ninguna brújula, estábamos extraviadas en nuestro propio mundo, así como andaba el pueblo de Dios en tiempos antiguos donde después vemos la bondad de Dios al guiarlos al camino hacia la tierra prometida.

El salmista David lo describe en:

Salmo 107:4-6 

Anduvieron perdidos por el desierto, por la soledad sin camino, Sin hallar ciudad en donde vivir. Hambrientos y sedientos, Su alma desfallecía en ellos. Entonces clamaron a Jehová en su angustia, Y los libró de sus aflicciones.

Aquí vemos un cuadro hermoso, de la providencia de Dios en la vida de su Pueblo.

Esto también me habla a mí, Dios me alcanzó en el desierto del mundo y me salvó, amada Él hará lo mismo por ti si es que ya no lo ha hecho. 

Dios aún no ha finalizado con la nación de Israel, y en realidad, Dios no ha terminado contigo ni conmigo.

Este salmo tiene un mensaje para nosotras.

Lo que relata el salmista es una historia real y muy triste en nuestros días con aquellos que están extraviados.

Ahora cuando andamos perdidas sin rumbo lo primero que tenemos es hambre y sed, principales cosas para sobrevivir y que buscamos para satisfacer lo que necesitamos, Dios, pone esas necesidades para buscar en Él provisión.

Dios nos quiere traer al camino para ser como Jesús. 

Sepamos esto amadas cuando tomamos decisiones incorrectas, rumbos equivocados Dios nos disciplina, ¿lo hace porque nos odia? No, lo hace porque Él nos ama y quiere hacernos más santas y desea purificarnos. 

Si tú eres una hija de Dios, no puedes escapar de la disciplina para traerte de nuevo a Su camino.

Proverbios 3:12

Porque el Señor a quien ama reprende, como un padre al hijo en quien se deleita.

Por otro lado muchas veces no queremos mostrar nuestra debilidad, que nadie sepa nuestra necesidad, que nadie sepa que andamos por el camino incorrecto, nuestro orgullo de pedir agua, pan para calmar nuestra necesidad, nos domina y vamos caminando fuera del camino que Dios nos ha trazado.

Tenemos que volvernos a él para su provisión, recibir su gracia y guía en el camino.

¿A dónde vamos para saciar nuestra sed?

A menudo usamos a personas para satisfacer nuestra sed y eso es idolatría, a veces la soledad, la desilusión es una bendición.

Cuando buscamos cosas para que nos satisfagan hemos hecho ídolos para nosotras, nuestro corazón es una máquina de hacer ídolos pensamos que nos hacen felices.

Necesitamos la Palabra de Dios desesperadamente, que sea un fuego en nuestros huesos, que sea una lámpara a nuestro camino, que sea una espada para pelear contra la tentación y que nos conforme a la imagen de Cristo.

Pidámosle que el Señor nos guíe como él salmista pidió y desechemos el pecado de necedad.

Nuestro señor quiere que, una vez salvas caminemos en su sendero, no quiere que deambulemos por caminos incorrectos de hambre y sed consumiéndonos la vida.

La buena noticia es que donde estemos podemos clamar a Dios para que venga a nuestra ayuda.

Alejémonos de las cosas que nos separan del camino de Dios, consultemos al señor a dónde tenemos que ir, conocer sus planes nos darán una dirección correcta. Isaías nos advierte en su libro en:

Isaías 30:1

¡Ay de los hijos que se apartan, dice Jehová, para tomar consejo, y no de mí; para cobijarse con cubierta, y no de mi espíritu, añadiendo pecado a pecado!

David supo clamar a Dios, el pidió misericordia en medio de su angustia y obtuvo la dicha del perdón por su pecado y Dios lo guio a retomar el camino:

Salmos 32:8

Te haré entender, y te enseñaré el camino en que debes andar; Sobre ti fijaré mis ojos.

David con la ayuda de Dios regreso al camino, porque el supo reconocerlo en todo, su arrepentimiento marcó la diferencia, Dios le ayudó a vivir correctamente, su hijo Salomón el más sabio en toda la tierra nos deja escrito inspirado por Dios lo siguiente:

Proverbios 3:5-6

Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas.

Ahora la falta de fe, la falta de perseverancia, las dudas y estar con el corazón dividido nos sacará muchas veces del preciado Camino.

Santiago 1:8

El hombre de doble ánimo es inconstante en todos sus caminos.

Amadas las Escrituras nos enseñan que hay dos diferentes caminos, uno bueno que lleva a la vida y otro camino malo que lleva a la muerte:

Proverbios 14:12

Hay camino que al hombre le parece derecho; Pero su fin es camino de muerte.

Este camino de muerte, lo habíamos transitamos antes de conocer a Jesús, sin saber que Él mismo es "el camino la verdad y la vida"

Jesús siendo el Camino hacia la vida, nos dijo que vayamos por el, nuestro Señor nos promete como a David que irá con nosotras y junto con él, Su mirada.

En una oportunidad Jesús en su extenso sermón del monte, dijo también a sus seguidores que hay dos caminos: uno que lleva a la vida y otro a la destrucción:

Mateo 7:13-14

Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella; porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan.

Además Jesús nos dice que Su camino no es fácil de transitar porque es estrecho, es angosto y no todos querrán ir por el.

Es verdad que nos cuesta aceptar los mandamientos de nuestro Padre, porque parecen duros:

¡no creo ser la única!

Pero lo que no nos damos cuenta es  que es lo mejor para nosotras, nos conviene. 

A continuación veamos algunas pautas en las Escrituras, lo que implica transitar junto a Jesús en Su camino:

_Su camino es angosto porque, la gente no puede entrar por ese camino y seguir viviendo a su manera.

Salmos 37:5

Encomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y él hará.

_Su camino es angosto porque no nos permite vivir egoístamente; por que tenemos que considerar al otro como superior a nosotras mismas.

Filipenses 2:3

Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo;

Su camino es angosto porque tenemos que morir a nosotras mismas. 

Gálatas 2:20

Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

_Su camino es angosto porque no nos permite transitar con todos los paquetes que traíamos del mundo; tenemos que deshacernos de ellos. 

Salmos 55:22

Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; No dejará para siempre caído al justo.

Hermanas, Jesús nos ha traslado a Su camino, del camino de muerte dónde andábamos sin esperanza y si permanecemos en él, descubriremos que el camino angosto nos lleva hacia la puerta donde encontraremos  plenitud, de gozo, tranquilidad para nuestras almas y deleites para siempre, cosas que solamente Dios puede prometer y dar, porque cuando Dios promete, Él cumple.

Entonces caminemos confiadas caminemos con Jesús y seamos agradecidas por Su cuidado y digamos lo que dijo el salmista en:

Salmos 116:8-9

Pues tú has librado mi alma de la muerte, Mis ojos de lágrimas, Y mis pies de resbalar. Andaré delante de Jehová En la tierra de los vivientes.

Entonces respondamos al llamando que Dios nos manda en Su palabra.

Si vemos que estamos extraviadas de hambre y sed, tomemos valor y con determinación volvamos al Señor, su Espíritu Santo nos ayudará a permanecer, él tendrá misericordia para perdonar.

Sigamos el camino que Dios nos ha trazado, es angosto pero es el único y el mejor.

Amiga tú que me oyes si aún no estás transitando por el camino deleitoso, te invito que tú también nos acompañes, reconoce a Jesús como tú Señor, ten fe en él y en su obra de Redención, él será tu guía, sus ojos pondrá sobre ti y te guiará hacia el Camino que lleva a la vida eterna con él.

¿Quieres caminar junto a él?

EL CAMINO DE DIOS ES ESTRECHO, NOS DA SEGURIDAD PORQUE TIENE UN FIN DELEITOSO A SU LADO PARA SIEMPRE.

¡Dios con nosotras!